Hay una frase que desde que la escuché hace ya varios meses intento aplicarla siempre que puedo. Dice así: «Si gastas tu tiempo en perseguir mariposas, estas se irán volando. Pero si utilizas tu tiempo en construir un bonito jardín, las mariposas vendrán a ti.» Me encanta esta frase por el trasfondo que tiene y porque hoy en día la envidia y las apariencias nos dominan, siempre estamos intentando ir con la gente «guay» para evitar enfrentarnos a nuestros problemas, a nuestro descuidado y feo jardín. A continuación, me gustaría comentar por qué cazar mariposas es perder el tiempo y por qué la mejor opción es construir nuestro propio jardín. Finalmente enunciaré lo que un buen jardín debería incluir en mi opinión.
Por qué cazar mariposas es inútil
Primeramente, intentar cazar algo que va más rápido que nosotros es completamente inútil. Asimismo, perseguir a gente que es más exitosa o que simplemente está fuera de nuestro alcance es una pérdida de tiempo porque ellos son inteligentes y van a saber nuestras intenciones, nos van a evitar. Además, gastaríamos mucho tiempo y energía en perseguir a estas personas ya que, como con las mariposas, para cazar alguna tiene que estar herida o despistada, y eso es muy improbable y poco ético. ¿A ti te gustaría que se aprovecharan de ti cuando estás pasando por un mal momento? Si es un no, entonces deja a las mariposas que vuelen libremente porque nunca sabes cuando puede atacarte un grupo de mariposas como venganza. Como en la vida real, toda acción tiene consecuencias, y «acosar» a una persona cuando ya se ha intentado escapar de ti varias veces es reprochable.
Construye tu propio jardín
Lo bueno se hace esperar. Tras haber argumentado por qué perseguir a las mariposas no es buena opción, como dice la frase hay un método mucho más efectivo, pero requiere de esfuerzo y tiempo al principio. Se trata de construir nuestro propio jardín. Lo bueno de esto es que nos «obliga» primero a mejorar el físico, mentalidad… para poder atraer a los demás. Así nos sentiremos bien con nosotros mismos, algo más importante casi que ser atractivo. En el proceso de mejorar, la cantidad de lecciones aprendidas por el camino será enorme: ser persuasivo, constancia, inteligencia emocional para poder «controlar» los sentimientos de los demás como en la publicidad (y utilizarlo para el bien eh). En adición, el flujo de mariposas será exponencial: el jardín jamás va a estar perfecto, por ello deberemos mejorarlo poco a poco para atraer a nuevos visitantes y que estos dejen «valoraciones» como las de Google maps sobre tu jardín, es decir, que te elogien y compartan tu progreso. Lo mejor de todo esto es que serán las propias personas las que decidan acercarse o no a tí, por ello las que vengan realmente tendrán interés por tí y por todo lo que has construido (serán muy fieles y tu comunidad será sana); tu posición será muy favorable porque podrás decidir quién entra y quién no a tu jardín.
¿Cómo se ve un buen jardín?
Para tener un buen jardín hay que trabajar varios aspectos. En primer lugar, hay que hacer deporte o ejercicio y comer bien para tener un buen físico y estar sano. Esto ayuda también a la disciplina: es necesario regar el jardín todos los días, de otra manera se secará. Además, mantener buena relación con la gente que ya te conoce hace que vayan más a menudo contigo y que hablen a otras personas sobre ti. Ten hobbies, esto equivaldría a poner en tu jardín decoraciones únicas como una fuente o unas rocas volcánicas. De esta forma, la gente que también tenga esos hobbies conectará contigo al instante. También hay que tener ambiciones y proyectos: háblales a otras personas sobre cómo va a ser tu jardín dentro de unos meses y trabaja en ello. Finalmente, comparte tu trabajo y tus experiencias para que otra gente pueda aprender e inspirarse: esto equivaldría a poner unos barrotes como valla para que la gente pueda ver el interior y se pueda inspirar. Pero eso sí, ten una valla, un filtro de personas para asegurarte de que tu comunidad sea sana.