Tips para sacar mejores notas y no morir en el camino

Primero quiero aclarar que las notas no representan ni tu grado de inteligencia ni tu facilidad de aprendizaje, por el contrario, es una forma de calificar la adaptabilidad que tienen los alumnos a este modo de aprendizaje concreto, por lo que las notas no determinarán tu futuro ni quién eres. Además de eso, no es para nada lo mismo estudiar para un global de biología, aprender cómo mejorar tu forma física o aprender sobre anatomía por gusto. La diferencia está en que en el global vas a ser evaluado, y para sacar buenas notas tienes que tener en cuenta que lo importante es aprender a ser eficiente, a saber cómo hacen las cosas tus profesores (exámenes, criterios…) y a desarrollar un método que te permita memorizar y mecanizar conceptos para aplicarlos en los éxamenes: los medios y los objetivos son completamente diferentes en cada proceso educativo. Los consejos que voy a dar para este tipo de educación son míos y en esencia voy a dar mi opinión: con esto quiero decir que no vienen de alguien experto en el tema, pero de un adolescente que tiene de media en lo que lleva de primero de bachillerato más de un 9, por lo que podría ser una situación mucho más útil y que se puede acercar a la tuya. No pretendo mostrar mis notas, si no dar consejos desde mi experiencia por si alguien los necesita.

contrólate, domina tu actitud

Desde siempre he sido un chico tranquilo, nunca me he puesto excesivamente nervioso antes, durante o después de un examen o a la hora de la entrega de notas. Lo importante de esto es que si eres capaz de mantenerte concentrado estudiando tu rendimiento será mucho mejor ya que interiorizarás más la lección. Para ello evita las distracciones y cumple con tus horarios y objetivos.

Por otra parte, estando tranquilo en un examen tu capacidad de comprensión, razonamiento, y resolución de problemas y preguntas será más efectiva y rápida. Como ejemplo, yo suelo hacer los exámenes más rápido y con menos errores que la media, y obviamente el sabérselo bien ayuda mucho, pero tengo amigos y conocidos que sabiéndoselo a la perfección minutos antes del examen, llegan a él y se empiezan a bloquear y no les sale nada: no se controlan. Para este problema recomiendo hacer exámenes de prueba en casa con un tiempo limitado para encontrarse en una situación similar a la de un examen de verdad en la que el tiempo es oro.

Otro problema que veo mucho es gente que después de hacer el examen salen llorando y frustados. Yo entiendo que si un examen sale mal puedas estar decepcionado, pero esto no debe ser la norma. No deberías tener esta actitud si has estudiado y has dado tu máximo en el examen. Si aún así no estás conforme con lo que has hecho piensa en el por qué de manera constructiva y sin machacarte por ello. Lo importante es que tienes que seguir y centrarte en los siguientes exámenes porque ese examen probablemente no determine tu futuro. Lo mismo con la entrega de notas, si crees que tu nota no es justa y tu profesor no te da la razón, lo mejor que puedes hacer es asumir la culpa y no echársela al profesor por su corrección. De esta forma podrás coger perspectiva y darte cuenta de tus fallos y de lo que tú puedes mejorar y no los de los demás: si te fijas en lo que no puedes cambiar (por ejemplo, cómo el profesor corrige los exámenes), está claro, la cosa no va a cambiar. En caso de estar muy satisfecho con tu nota, permítete un momento de celebración, pero sigue analizando tus errores y tus aciertos porque quizá puedas hacerlo mejor todavía. Esto lo digo porque hay personas que normalmente sacan cuatros que de repente sacan un seis y se creen los reyes, pero realmente están todavía a un buen trecho del diez, además si bajan la guardia volverán a suspender seguramente, es todo cuestión de actitud y perspectiva.

conócete y haz tu propio método

Cada persona es diferente, es por eso que cada uno estudia de una manera. Por ello, aunque vaya a explicar y opinar en próximos artículos sobre las mejores y peores técnicas de estudio para ayudarte a decidir cuáles te pueden venir mejor, es esencial que pruebes todas y ya de ahí elijas cuáles te convienen porque esas listas son subjetivas y puede que no se ajusten a tí.

Un buen método debe ser:

  • Eficiente (te hará retener la mayor cantidad de información en el menor tiempo posible): Una forma muy útil de mejorar la eficiencia es tener en mente el principio de Pareto, que dice que el 80% de los resultados proviene del 20% del esfuerzo. Atendiendo a este, hay acciones o partes del temario más importantes que te harán sacar mejor nota que otras. Por ejemplo, si estás aprendiendo a hacer textos argumentativos en lengua, vale mucho más aprender la estructura y los temas y sus argumentos posibles que los conectores adecuados, los tecnicismos… Por ello, en una época de éxamenes no intentes estudiar asignatura por asignatura, identifica los puntos clave en cada una y prioriza.
  • Sistemático y repetible (que te sirva para cualquier asignatura y examen): no varíes el método según la asignatura porque eso te va a líar mucho. Para ello haz un método lo más genérico posible y casi sin especifidades agrupando las características comunes a todas las asignaturas o a un grupo de ellas. Por ejemplo, matemáticas, lengua y biología tienen conceptos complejos, pues idea una forma de aprendértelos de memoria. Sin embargo, en las matemáticas y la física hay mucha más práctica, pues deberías hacer un plan específico para hacer problemas basado en entender y mecanizar los ejercicios.
  • Divertido (que te haga amar el estudio y te anime a dar más de ti): es insostenible que cada vez que te pongas a estudiar quieras dejarlo, domirte y distraerte todo el tiempo porque tu cuerpo se cansará y tú no sentirás que has avanzado. Hay muchas formas de divertirse estudiando dependiendo de tu personalidad. Por ello vuelvo a repetir, recomiendo que pruebes muchas cosas y adoptes las que te gusten. Algunas son: estudiar con amigos, recitar lo que sabes a otros o a ti mismo, crear reglas memotécnicas, redactar lo que sabes, crear palacios mentales…

Atiende en clase y haz los deberes

Aunque no lo creas, gran parte de mi éxito académico se debe a estas dos cosas: atender en clase y hacer los deberes/repasar lo de ese día/practicar en casa. Estas hacen una combinación idónea que te familiarizará con el temario y te ahorrará mucho sufrimiento. Atender en clase es recibir información directamente de un profesional en la materia y plasmarla en el papel con tus palabras. Gracias a esto tendrás información precisa y ajustada a lo que será el examen, pero es que encima la estarás entendiendo porque la estás anotando con tus palabras. Otra ventaja fundamental es que puedes preguntar al profesor las dudas, esto mejorará tu comprensión y el profesor verá interés en ti. Por otra parte, el hecho de revisar, hacer deberes o practicar en casa hará que los conocimientos se asienten más rápido porque estarás forzando al cerebro a recordar algo, mejorando el aprendizaje. Soy consciente de que da mucha pereza estar repasando las cosas o haciendo los deberes, pero no tienes que hacerlo en todas las asignaturas, solo en las que veas que lo necesitas. Además, si lo haces te darás cuenta de que cuando vayas a estudiar para los exámenes se te hará mucho más fácil porque lo recordarás.

Adáptate cuánto antes

El primer trimestre es fundamental, es verdaderamente el que marca cómo te va a ir el año. Dime cuántas veces has visto que alguien que ha suspendido mucho el primer trimestre haya sacado sobresalientes en el tercer trimestre, o al revés, quién sacando sobresalientes en el primero ha suspendido todo en el último; nadie. Y podrías decir, bueno es que hay gente a la que le cuesta más al principio de curso porque no son tan inteligentes… Pero esto no es así, un buen primer trimestre marca tus hábitos de estudio, de atender y de hacer preguntas, tu interés por la asignatura porque si sacas buenas notas te va a gustar más el temario, tu relación con el profesor y la sensación de que si lo has hecho una vez lo puedes hacer mil veces más. En efecto el tema de «remontar» el curso es prácticamente imposible tanto en asignaturas continuas como en no continuas. En las que son continuas el temario se acumula, por lo que si llevas mal el del primer trimestre no vas a aprenderte ese más lo del segundo en un solo trimestre; aunque lo que cuente es la progresión y no la media de los tres trimestres, el esfuerzo que tienes que hacer al final de curso es colosal y poco realista. Por otro lado, en una asignatura no continua, en la que la nota final es la media de los tres trimestres, si tienes un primer trimestre malo es más fácil recuperarlo. Aún así, el suspenso te va a hacer media, por lo que si sacas en los trimestres 3, 6, 9, tu media va a ser solamente de seis incluso si has aprendido la lección y te has esforzado al final.

Lo que quiero decir es que en el primer trimestre tienes que destacar entre tus compañeros llevándote bien con el profesor y sacando buenas notas, lo cual no es tan difícil porque tus compañeros estarán tanteando sin esforzarse mucho y tu profesor haciéndolo asequible porque es el principio del curso. Créeme que una vez pasado el primer trimestre con todo esto cumplido, los demás se te van a hacer mucho más fáciles. Sin embargo, todo lo dicho no es excusa para rendirte a partir del primer trimestre si este no te ha salido bien, es solo un consejo que ayuda mucho.

Y recuerda, no te abrumes con tu media o tus notas pasadas, estas no determinan quién eres. Simplemente intenta sacar mejores notas poco a poco y aprenderás lecciones valiosísimas por el camino.

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